El Marino, que ha vuelto a plaza de descenso, a pesar del empate logrado en un feudo tan complicado como Pasarón, afronta hoy una nueva final en Miramar frente a un Villa santa Brígida que visita por vez primera el feudo del conjunto luanquín, y el encuentro, para facilitar el regreso a Gran Canaria del rival de turno, será matinal y tendrá por juez al gallego Javier González Arévalo, colegiado que en la actual temporada no ha dirigido partido alguno de los contendientes.
Ante un rival que viene de perder (0-3) frente al Alcorcón, máximo rival del Marino por la plaza de promoción, el conjunto luanquín no puede fallar, porque, por una parte, el Alcorcón podría incrementar su ventaja y, por otra, Fuenlabrada y San Sebastián de los Reyes podrían acercarse peligrosamente al conjunto que dirige José Luis Quirós.
VUELVE RUBEEN SUAREZ Ausente en Pontevedra por sanción, Rubén Suárez vuelve hoy a la titularidad, con lo que Pablo Lago retorna a la banda izquierda, ocupada en Pasarón por Fredy, jugador que, por molestias en una rodilla, ni tan siquiera está hoy entre los convocados, al igual que le sucede a Miki, que no se ha recuperado de su dolencia de espalda.
Quirós, que tampoco podrá utilizar por sanción a Vicki y Nacho García, jugador éste que cumplirá hoy su cuarto y último encuentro de suspensión, formará de salida con Guillermo; Canterla, Pantiga, samuel, Alex; Pascual, Serrano; Pablo Díaz, Rubén Suárez, Pablo Lago; y Alberto Suárez, quedándole para cambios el portero Ramiro y Jorge, Ñoño, Efrén y Darío Aliaga.
Del Villa Santa Brígida, un equipo que sumó 16 de sus 40 puntos como visitante, gracias a cuatro victorias y otros tantos empates, José Luis Quirós comentó que "tiene en el centro del campo a un jugador, Angel, que es la referencia del equipo en la zona, donde está muy bien apoyado por el asturiano Dudi, exjugador del Universidad, que juega habitualmente", para añadir después que "tendremos que tener mucho cuidado con el delantero Gustavo, que lleva 14 goles" y que, por cierto, pasó con más pena que gloria por el Langreo, donde ni tan siquiera concluyó el gallego el contrato que había firmado.
En cualquier caso, el Marino necesita los tres puntos y a por ellos va a salir a Miramar, aunque no estaría de más que la afición apoyara al equipo en choque tan importante.
la voz de asturias
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